Almagro, el Palacio de Catalina, un espacio que durante sus obras de rehabilitación fue el hogar de acontecimientos anómalos: restos de monjes emparedados y una presencia. El presentador, Iker Jiménez, ocupa la habitación 39, donde siente perfectamente dónde está una presencia. Según los historiadores, los monjes que construyeron el palacio ya intuían del misticismo del lugar.