Joji Kano (Sonny Chiba) es un detective de una pequeña ciudad de Okinawa que ha sido contratado por una mujer que quiere encontrar a su hija Yuna que desapareció hace cinco años. Cuando el cuerpo de una prostituta es quemado de forma que es imposible de reconocer quien era en un incendio provocado, la policía vincula este cuerpo con el de la niña desaparecida llamada Yuna que Jiro ha estado buscando. Poco convencido de que ese cuerpo es verdaderamente el de Yuna, Jiro comienza a investigar por su cuenta.