Mateo y Trini están en unas vacaciones románticas en Argentina. Su viaje se convierte en una pesadilla, cuando son secuestrados por una banda de narcotraficantes. Los delincuentes le exigen a Mateo les lleve a España un cargamento de cocaína y se quedan con Trini como rehén y como garantía de que Mateo entregará las drogas. Una vez que él cumpla con su misión, los delincuentes se comprometen a poner a Trini en el próximo vuelo a Madrid.